EL CORONAVIRUS LA ECONOMÍA MUNDIAL SHOCK ECONÓMICO Y CAMBIOS RADICALES.
Escrito por : Rene Pineda
En tan solo unas pocas semanas, una dramática cadena de eventos ,trágica pérdida de vidas, cadenas de suministro mundiales paralizadas, envíos interrumpidos de suministros médicos entre aliados y la mayor contracción económica mundial desde la década de 1930; ha dejado al descubierto las vulnerabilidades de las fronteras abiertas.
Después de cuarentenas y el cierre de gran parte de la economía global, la incertidumbre sigue siendo la mejor manera de describir este momento histórico.
¿Reabrirán las empresas y volverán las personas a sus trabajos? ¿Viajaremos de nuevo? ¿Será suficiente la avalancha de dinero de los bancos centrales y los gobiernos para evitar una recesión profunda y duradera.?
Lo cierto es : Que la pandemia conducirá a cambios permanentes en el poder político y económico de maneras que se harán aparentes en el futuro próximo.
Se argumentó por mucho tiempo que en un mundo globalizado donde las fronteras no importaban, siempre podríamos recurrir a otros países si algo sucediera en el nuestro. Ahora, las fronteras de repente sí importan, ya que los países se aferran firmemente a las máscaras y equipos médicos, y luchan por conseguir suministros. La crisis del coronavirus ha sido un poderoso recordatorio de que la unidad política y económica básica no es tan fuerte ,como se creía.
Para construir nuestras cadenas de suministro aparentemente eficientes, buscamos en todo el mundo el productor de menor costo de cada eslabón de la cadena.
Pero éramos miopes, construimos un sistema que claramente no es resistente,es insuficientemente y vulnerable a las interrupciones. La producción y distribución mundial, con inventarios bajos , puede ser capaz de absorber pequeños problemas, pero ahora hemos visto el sistema aplastado por una perturbación inesperada donde los canales de distribución se están rompiendo.
El sistema económico que se debe de construir después de esta pandemia tendrá que ser menos miope, más resistente y más preparado para pánicos financieros. Los países tendrán que esforzarse por lograr un mejor equilibrio entre aprovechar la globalización y un grado necesario de autosuficiencia,se tiene que producir más a nivel local.
Las empresas que forman parte de las cadenas de suministro mundiales han sido testigos de primera mano de los riesgos inherentes de depender a que su producción dependa de las aperturas de las fronteras de otros países. Ahora están teniendo pérdidas grandes,causadas por la interrupción de suministros. En el futuro, es probable que estas empresas tengan más en cuenta los riesgos de producir en diferentes países, lo que dará como resultado cadenas de suministro más locales y sólidas.
Hay cambios fundamentales que ocurren durante tiempos difíciles,muchas veces se dan en tiempos de guerra. Aunque el enemigo ahora es un virus y no una potencia extranjera, la pandemia del coronavirus ha creado una atmósfera de guerra en la que los cambios se están dando repentinos.
La pandemia de coronavirus es la primera crisis desde la década de 1930 que afecta tanto a las economías avanzadas como a las en desarrollo. Esto puede ocasionar recesión profunda y prolongada y hasta una depresión económica.
Como lo que ocurrió en la década de 1930, muchos países dejarán de pagar sus deudas y esto aumenta aún más la crisis y el pánico mundial crecerá aún más.
Los llamados a restringir el comercio y los flujos de capital encuentran suelos fértiles en los malos tiempos.
El daño al comercio y las finanzas internacionales probablemente sea extenso y duradero.
La brecha entre los países ricos y pobres se ampliará aún más.
El nacionalismo económico llevará cada vez más a los gobiernos a cerrar sus propias economías del resto del mundo.
Las consecuencias económicas desafían cualquier cálculo. Muchos países enfrentan un shock económico mucho más profundo y más salvaje de lo que jamás hayan experimentado. En sectores como el comercio minorista ha sido devastador. Muchos comercios no volverán a abrir, y estos trabajos se perderán permanentemente. Millones de trabajadores, propietarios de pequeñas empresas y sus familias se enfrentan a una catástrofe. Cuanto más tiempo mantengamos la cuarentena más profundas serán las cicatrices económicas y más lenta será la recuperación.
Muchos trabajos de servicios y de bajos salarios y baja calificación, especialmente los proporcionados por pequeñas empresas, no volverán cuando esto termine. Sin embargo, los trabajadores que brindan servicios esenciales como la policía, la lucha contra incendios, la atención médica, la logística, el transporte público y los alimentos tendrán una mayor demanda, creando nuevas oportunidades de trabajo y aumentando la presión para aumentar los salarios y mejorar los beneficios en estos sectores tradicionalmente de bajos salarios.
Lo que creíamos saber sobre la economía y las finanzas ha sido radicalmente cambiado. Desde la conmoción de la crisis financiera de 2008, se ha hablado mucho de cambios económicos.
Ahora es necesario actuar..
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